El Gobierno de Petro suspende el cese al fuego con una de las disidencias de las FARC por la masacre de cuatro jóvenes indígenas

El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha anunciado en la mañana de este lunes que suspende el cese al fuego con el Estado Mayor Central, una de las dos grandes disidencias de la antigua guerrilla de las FARC, a partir de las próximas 72 horas. “Se informa que el cese bilateral que había actualmente con este grupo armado en los departamentos del Meta, Caquetá, Guaviare y Putumayo se suspende y se reactivan todas las operaciones ofensivas”, se lee en un comunicado de prensa publicado por la Presidencia de la República.

La decisión de ponerle fin a la tregua se tomó después de confirmar que hombres armados de estas disidencias retuvieron y mataron a cuatro jóvenes indígenas en el departamento del Putumayo. “El día de ayer se conoció el asesinato de cuatro menores de edad por el frente Carolina Ramírez, del Estado Mayor Central. Un hecho atroz que cuestiona la voluntad de construir un país en paz. No hay justificación alguna para esta clase de crímenes”, expresó la Presidencia.

Al finalizar un consejo de seguridad en el que participaron el ministro de defensa, Iván Velásquez, y la cúpula de las fuerzas armadas, el Gobierno explicó que la suspensión del cese al fuego se dio después de escuchar a delegados de las comunidades y del Consejo Extraordinario de Seguridad. El presidente anunció que las acciones militares se realizarán bajo el respeto de los derechos humanos y el Derecho Internacional Humanitario.

El Gobierno también explicó que se convocó a los delegados del Estado Mayor Central para informarles de la decisión, pero se excusaron de asistir. El presidente Petro insiste en que el cese se terminó debido a la grave violación del Derecho Internacional Humanitario por parte de esta organización al margen de la ley, sumado a otros hechos que generan incertidumbre y zozobra en la población. “Si el cese al fuego bilateral no es efectivo en determinados territorios para proteger la vida y la integridad de toda la población, no tiene sentido persistir en ello”, dijo el mandatario.

El Estado Mayor Central respondió este lunes a la decisión del Gobierno. “El rompimiento unilateral desatará la guerra y se multiplicarán los muertos, heridos y prisioneros, contrario a una política de paz total”. De acuerdo con el comunicado de esa disidencia, el cese al fuego que se firmó desde el 22 de septiembre de 2022, “siempre fue unilateral porque los operativos militares, que de nuevo dejan entrever el paramilitarismo como política de Estado, jamás cesaron”.

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En el comunicado, los disidentes aseguran que ellos no cometieron la masacre de los jóvenes indígenas: “Los hechos que se nos acusan nunca fueron verificados e insistimos que en Caquetá, Meta y Guaviare no ha habido combates de ningún tipo, extorsiones o ajusticiamientos”.

En contraste con estas declaraciones, el alto comisionado para la paz, Danilo Rueda, confirmó a través de un comunicado de prensa que el frente Carolina Ramírez, parte del llamado Estado Mayor Central, era el responsable del asesinato múltiple. “Rechazamos enfáticamente esta conducta criminal del Frente Carolina Ramírez del EMC- FARC que desconoce el DIH y constituye un atentado a la paz. De acuerdo con las convenciones y protocolos internacionales, el reclutamiento de menores es un crimen de guerra que afecta a los niños y niñas, también a sus familias y comunidades”.

La disidencia afirma que el Gobierno de Gustavo Petro ha sido “el menos serio para entablar conversaciones”. Según la organización, “aún no se ha instalado el Mecanismo de Veeduría, Monitoreo y Verificación y ha habido permanentes violaciones a su protocolo en temas que van desde la vocería para pronunciarse en aspectos del cese al fuego hasta la incesante necesidad de verificar hechos sobre terreno”.

El asesinato de los cuatro indígenas y la posterior decisión de terminar el cese el fuego han despertado las reacciones de la oposición. La senadora uribista María Fernanda Cabal escribió en su cuenta de Twitte: “El primer responsable de la escalada de violencia es Petro; que bajo el engaño de la paz total, dejó a Colombia en manos de los terroristas. Si a las FARC les hubieran perseguido y no pactando supuestos ceses al fuego, se hubieran evitado hechos como la masacre de 4 niños”. Por su parte, el senador Iván Cepeda, defensor de la negociación de paz, respondió: “Ahora los detractores de la paz, los mismos que fabricaron las violencias que hoy padecemos, dicen que los ceses al fuego fracasan. En realidad, la protección de la gente no les preocupa. Buscan desalentar cualquier iniciativa para acabar el recrudecimiento de la confrontación”.

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