El mexicano Julián Araujo, de defender a los campesinos en EE UU a la zaga del Barcelona

El futbolista mexicano Julián Araujo, durante su presentación con el FC Barcelona, este viernes.
El futbolista mexicano Julián Araujo, durante su presentación con el FC Barcelona, este viernes.SARA GORDON (FC BARCELONA)

Cuando Julián Araujo regresaba a casa tras los entrenamientos, su padre estaba exhausto en casa. Jorge Araujo pasaba jornadas casi infinitas trabajando en el campo de Lompoc, en California. Prácticamente, no había contacto entre padre e hijo debido a la rutina. Jorge dejó Guanajuato a los 15 años para cruzar la frontera y establecerse en EE UU con condiciones laborales mínimas y sin papeles. Junto a Guadalupe, su esposa, se mantuvieron estoicos para formar una familia con tres hijos. El pequeño Julián decidió jugar fútbol, el deporte rey en México. Empezó en ligas infantiles hasta que irrumpió en una academia del Barça.

El conjunto catalán tenía una pequeña versión de la Masia en Arizona. Los visores atrajeron a Araujo e incluso le ofrecieron viajar a Barcelona para entrar en la histórica fábrica de futbolistas. El lateral, sin embargo, continuó su formación en EE UU hasta que en 2018 el Galaxy de la MLS le fichó. Con eso, se le abrieron las puertas en las selecciones juveniles de Estados Unidos. El recuerdo mexicano estaba en casa con sus padres, quienes hicieron del trabajo en el campo de fresas su base para progresar y también se convirtió en una bandera para Julián Araujo. “Era trabajar todo el día agachado”, contó Jorge Araujo a Telemundo. Araujo ha apoyado a la comunidad de campesinos en Lompoc durante los meses más duros de la pandemia y ha levantado la voz para exigir más derechos laborales. “Dice que cuando tenga más posibilidades, él quisiera establecer un comité, para que se les pague honestamente a los campesinos mexicanos o de otras nacionalidades”, contó su madre, Guadalupe, a ESPN.

Araujo, de ahora 21 años, debutó en la Primera División en Estados Unidos en 2019. Ahí coincidió con otros mexicanos como Jonathan Dos Santos y Javier Chicharito Hernández. A la par, seguía escalando escalones en las selecciones de EE UU y llegó a jugar en las clasificatorias para los Juegos Olímpicos de Tokio. En 2021, la Federación Mexicana comenzó a atraer a Araujo. Antes que todo, hubo que convencer a Tata Martino para que le diera una oportunidad y, en un amistoso contra Chile en Texas, jugó los 90 minutos. Jugaría otro partido completo en la Nations League y, su primer partido oficial, fue contra Panamá en las eliminatorias. Para el Mundial de Qatar, Martino prescindió de él junto con otras promesas mexicanas como Santiago Giménez (Feyenoord) y Diego Lainez (Tigres).

En el mercado de fichajes de este invierno, el Barcelona intentó fichar al mexicano, pero lo hizo a última hora. Tanto así que el pase del futbolista llegó tarde 18 segundos después de la hora de cierre. El Barcelona contó que se trató de un error informático y apeló la decisión ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo. Este viernes, el Barcelona ha oficializado su llegada por las próximas tres temporadas y media, es decir, hasta junio de 2026, año en el que se jugará el Mundial en EE UU, México y Canadá. Araujo recalará, primero, en la filial del Barcelona, el Barça Atlètic, dirigido por su compatriota Rafa Márquez.

“Es un sueño realidad, me gustaría ser un ejemplo para las futuras generaciones. Estas semanas fueron largas, pero ya estoy aquí, en el mejor equipo del mundo”, comentó Araujo este viernes. El mexicano, con cabello de tinte rosado, se une al pequeño grupo de compatriotas que han llegado al Barcelona como los hermanos Dos Santos y Márquez. El fichaje de Julián Araujo significa, hasta ahora un triunfo para la comunidad mexicoestadounidense en el fútbol mundial.

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