Los campeones siguen con vida. Los Warriors de Golden State han eliminado este domingo a los Sacramento Kings en el séptimo juego de la serie (120-100). El equipo sigue con vida gracias a Steph Curry, quien anotó 50 puntos en un triunfo a domicilio sobre el equipo que había sido revelación en la conferencia Oeste. Con su actuación, el base ha logrado esta tarde un récord personal en partidos de postemporada y se ha convertido en el jugador que más ha encestado en el partido definitivo de una clasificación. Los Warriors recibirán el martes en casa a los Lakers de LeBron James para dar inicio a las semifinales. Es la primera vez que ambas franquicias se encuentran desde 1991.
Curry ha corregido esta tarde el rumbo de Golden State, que inició perdiendo dos partidos al hilo en la eliminatoria. Fue la primera vez que el equipo arrancó una serie dos abajo desde que el MVP viste la camiseta de la franquicia de San Francisco. Los Warriors ganaron un par como visitantes en la capital de California, donde fueron recibidos con hostilidad por una afición que no había albergado juegos de playoffs desde hace más de 15 años. El equipo despertó incluso dudas tras su derrota del viernes en casa, donde habían ganado 14 de los últimos 15 partidos. Este domingo, en lo que ha sido el cuarto séptimo juego en la era de Steve Kerr, el destino de los campeones estuvo en juego hasta que Curry quiso.
Los Warrios salieron del vestidor tras el medio tiempo decididos a acabar con los playoffs de Sacramento. En el tercer cuarto tuvieron una racha 13-4. Curry encestó en el juego 20 de 38 tiros dentro del área y anotó siete triples. Con su actuación de hoy se suma a otros destacados jugadores que han encestado casi 50 puntos en un séptimo jugo. Es una selecta lista formada por Wilt Chamberlain, Rick Barry, Sleepy Floyd y Kevin Durant, quien metió 48 puntos como jugador de los Nets en la serie de 2021 contra los Bucks de Milwaukee.
El base recibió ayuda de donde menos se esperaba. Kevon Looney atrapó 21 rebotes con una noche defensiva tan especial como la que tuvo Curry en el ataque. Looney hizo un doble-doble, atrapó 10 rebotes ofensivos, duplicando por momentos las oportunidades para los Warriors sobre la pintura de sus rivales. Ocho de los rebotes ofensivos fueron en el tercer cuarto, donde los visitantes comenzaron a sellar la eliminatoria con 35 puntos frente a 23 de los Kings.
Looney, quien metió 11 puntos, tuvo en los siete partidos 106 rebotes, casi 40 fueron ofensivos. El de este domingo fue su quinto partido al hilo atrapando diez o más rebotes. Looney y Curry han sido los jugadores más confiables para una franquicia que se ha mostrado errática. Incluso Klay Thompson tuvo un flojo arranque metiendo solo uno de diez tiros y fallando sus primeros disparos detrás de la línea de tres. Afortunadamente, su tarde comenzó a cambiar a partir del tercer cuarto. Cerró la noche con 16 puntos. Andrew Wiggins encestó 17.
Domantas Sabonis se elevó entre los Kings logrando 22 puntos, ocho rebotes y siete asistencias. La defensiva de Golden State logró contener a De’Aaron Fox, quien jugó su tercer partido con el índice roto en su mano de tiro. La estrella de Sacramento se quedó con 16 puntos, convirtiendo ocho de 29 disparos.
Kerr llamó indisciplinado a su equipo tras el juego del viernes. Los Warriors perdieron 18 balones, encajando 23 puntos de los Kings, quienes lograron empatar la serie a tres triunfos por bandos. Draymond Green anotó entonces cuatro puntos, después de encestar 21 puntos en el quinto de la serie. A pesar de esto, Kerr apostó por Green como titular para la tarde en la que se jugaban la temporada. “Estos tipos son campeones, están defendiendo un título de hace un año, el cuarto en los últimos ocho años. Estos tipos saben qué hacer”, se justificó el entrenador. Su apuesta le dio la razón. Ahora enfrentarán a los Lakers, un equipo con el que tienen un récord de 11 partidos ganados frente a 35 victorias para los angelinos.
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