No hubo trampas ni grandes diferencias en la segunda de parte de la maratón por el desierto de Rub’ al Khali. Los favoritos domaron una jornada más las preciosas dunas blandas del sureste de Arabia Saudí para mantener el status quo en la clasificación. Hubo cambios, un día más, en la parte delantera de la carrera de motos, debido a las mínimas distancias entre los dominadores de la general. Toby Price (KTM) llega a la penúltima etapa como líder de la clasificación por delante de Skyler Howes (Husqvarna), que se dejó casi un minuto respecto al australiano, beneficiado por las bonificaciones por abrir pista.
La etapa del sábado entre Shaybah y Al-Hofuf, con 153 km y más dunas en el menú del día, será la última oportunidad para intentar dar un golpe de efecto en la tabla. Separados por menos de tres minutos, los tres primeros de la general apuestan por mantener su línea en este Rally Dakar. La de Price ha sido la constancia, mientras que Howes y Kevin Benavides (Honda, +2m40s) han rascado muchos minutos en algunas jornadas de inspiración. No están descartados quienes les persiguen en la general. José Ignacio Cornejo (Honda), ganador de la duodécima etapa con un tiempo de 1h57m27s y octavo en la tabla, está a 23m14s y todavía tiene margen para dar un golpe maestro. Lo mismo aplica a Sanders, Luciano Benavides, Van Beveren o Quintanilla, todos bien capacitados y equipados para triunfar.
“El cuadrante vacío ha sido como habían dicho. Mucha arena y mucha nada ahí fuera”, valoró Price. Demasiada nada, tanta que no ha habido sacudidas en la general. Mañana, todos apretarán al máximo, ya que los primeros clasificados saldrán en orden inverso en la etapa final. “Será divertido”, avisa Sanders, algo rezagado y con molestias en el brazo por una piedra incrustada en la piel. “La idea es apretar al máximo y ver dónde estamos”, vaticinó Howes. Lorenzo Santolino (Sherco), 18º en la etapa y mejor español en la clasificación, aspira a colarse entre los diez mejores el domingo en Dammam. Es undécimo (1h02m22s) y tiene a menos de diez minutos a Mason Klein: “Ha sido divertido pilotar en estas dunas, hoy con una conducción más relajada. Cuando hay trazas puedes prever mejor hacia dónde vas”.
Loeb iguala un registro de Vatanen
Jornada redonda para Sébastien Loeb, que logró su quinta victoria consecutiva, la sexta en la presente edición, y se situó segundo en la general. El finlandés Ari Vatanen, el piloto con más victorias de etapa de la historia en coches (50), había sido hasta ahora el único capaz de encadenar cinco triunfos consecutivos. Fue hace más de tres décadas, en 1989. A pesar del dato, el francés del BRX no puede sonreír todo lo que querría ya que Nasser Al-Attiyah, líder sin fisuras, volvió a conservar con su Toyota y ya acaricia su quinto Dakar. Tercero en la etapa a 3m31s del ganador, el catarí mantiene un cómodo margen de casi hora y media al mando de la tabla y sabe que tan solo necesitar llegar a Dammam.
Lucas Moraes, novato en la prueba y compañero del líder, se dejó 11m38s en las dunas blandas, un terreno donde ya reconoció que todavía le falta mucha experiencia. Si no le ocurre nada extraordinario el sábado, el brasileño de 32 años completará el podio en la línea de meta junto a los dos ases de la categoría, huérfana de emoción desde la primera y demoledora semana de la presente edición. Con los Audi de Carlos Sainz y Stéphane Peterhansel noqueados, además de los problemas de Yazeed Al Rhaji con su Toyota, la carrera perdió toda la emoción, pero permitió que Loeb, el primer favorito descartado, encontrara el aliciente de empujar por la segunda posición. Al rally, muy duro en la primera semana y blando como las dunas de Rub’ al Khali en la segunda, le quedan dos jornadas para finalizar. A estas alturas, la única incógnita es saber quién reinará a dos ruedas.
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