Robo botellas: El presidente del tribunal del juicio de Atrio: “El perito no tiene por qué saber de vino ni gustarle” | España

El perito encargado de valorar los vinos de lujo robados en el restaurante Atrio de Cáceres ha asegurado durante la segunda sesión del juicio que las 45 botellas sustraídas tendrían un precio de mercado de algo más de 750.000 euros, frente al precio de 1,6 millones de euros que le atribuyeron en conjunto los propietarios del establecimiento en la carta. El ingeniero técnico industrial Roberto Nebreda Pineda, que se ha definido como experto en peritaciones para compañías de seguros, no ha sido capaz de responder a las preguntas de la defensa de los dos acusados sobre cómo había realizado la valoración y sobre su conocimiento de los vinos sustraídos. El presidente del tribunal, el magistrado Joaquín González Casso, ha interrumpido y zanjado el interrogatorio: “El perito no tiene por qué saber de vino ni gustarle el vino”.

Durante la segunda sesión del juicio por el robo que se celebra en la Audiencia Provincial de Cáceres, supuestamente perpetrado el 27 de octubre de 2021 por el ciudadano rumano-holandés de 49 años, Constantin Dumitru, y su pareja, una exmiss mexicana de 28 llamada Priscila Guevara, el perito ha afrontado preguntas sobre, por ejemplo, cuál era la uva que predominaba en el Chateau d’Yquem de 1806 —con un precio en carta de 150.000 euros— o en otros vinos de alta gama, como las 38 botellas de Romanée Conti, que también fueron robadas.

Las preguntas al perito que ha evaluado los vinos robados, y cuyo informe ha llevado a la aseguradora Reale Seguros a desembolsar 753.454 euros a los propietarios del hotel-restaurante Atrio en calidad de indemnización, ha proseguido orientadas a valorar las medidas de seguridad existentes en el establecimiento. Pero el presidente del tribunal, de nuevo, ha considerado las preguntas “impertinentes” e “irrelevantes”. El perito se define en su perfil de Linkedin como “especializado en incendios y riesgos diversos”.

Las cámaras de Atrio son las que recogieron las imágenes que recogen a los autores del robo, en blanco y negro y con escasa calidad. El propio José Polo, sumiller y uno de los dueños del local junto al chef Toño Pérez, reconoció en la jornada pasada del juicio que, tras el robo, habían procedido a cambiar las cámaras de seguridad por “otras de última generación”. Los vídeos no han sido proyectados en el juicio como pruebas documentales por problemas técnicos.

Por su parte, los agentes de la Policía Científica que han comparecido en la vista han explicado que fue hallado material genético en el váter de la habitación 107 de Atrio que es compatible con el de los dos acusados, y con el de “una tercera persona desconocida”. Y han asegurado que la imagen de la carta de identidad suiza, utilizada presuntamente por Guevara, con el nombre de Mirka Golubic, para registrarse en el hotel, “no tiene calidad suficiente para emitir ningún juicio”.

Los dos acusados llevan en prisión provisional “por riesgo de fuga” que fueron detenidos en un vehículo cuando trataban de cruzar la frontera de Eslovenia y Croacia el pasado 19 de julio. El juicio continúa a falta de las conclusiones de las partes. Constantín Dumitru y Priscila Guevara se sientan en el banquillo bajo la acusación de robo con fuerza agravado por el alto valor de los vinos, por el que se peide para ellos cinco años de prisión. La defensora ha remarcado que sus clientes se consideran inocentes y que “no tienen las botellas”.