El Clan del Golfo ha presionado a líderes sociales de varias regiones de Colombia para que se movilicen este domingo 9 de abril, cuando se cumplen 75 años del asesinato de Jorge Eliécer Gaitán y se conmemora el Día nacional de la memoria y solidaridad con las víctimas del conflicto. Así lo ha confirmado el miércoles por la noche la Oficina del alto comisionado para la paz, que exige al grupo narcotraficante que desista de sus intenciones de movilizarse y de sus amenazas. “Nadie puede imponer a otros por la fuerza cómo expresarse ni organizarse”, se lee en un comunicado. Asimismo, la entidad ha reconocido una reunión del pasado 21 de marzo entre el alto comisionado, Danilo Rueda, y varios de los líderes sociales afectados en el Norte del Chocó.
El comunicado de la Oficina del alto comisionado es una respuesta a una denuncia que el grupo narcotraficante realizó horas antes. El Clan del Golfo criticó en un comunicado los diálogos de Rueda con las comunidades y lo acusó de faltarle el respeto a las organizaciones populares. “Invita a las comunidades a que no participen en las actividades que ellos mismos han programado (…) El señor Rueda revictimiza a quienes más han sufrido y siembra odios y desconfianzas”, se lee en el texto difundido. El grupo niega haber intimidado a las organizaciones: “Estos actos están siendo programados por las comunidades y las organizaciones populares de manera espontánea, sin que los estemos apoyando, ni participando en forma alguna en su coordinación”.
Unos audios que difundió El Tiempo este jueves revelan que en una reunión con el alto comisionado, varios líderes sociales le expresaron sus preocupaciones por las presiones. “Las víctimas no pueden ser instrumentalizadas por nadie, ni por el Gobierno, ni por un partido político, ni por un grupo armado”, les dice Rueda en uno de ellos. Para el alto comisionado, es claro que el grupo armado comete un error al sumarse a las conmemoraciones por el 9 de abril: “El mensaje no lo va a escuchar nadie (…) es inconveniente. Va a tener un costo fuerte. No de muertos, de credibilidad”.
La Oficina del alto comisionado aclaró en su comunicado que los audios, que menciona el Clan del Golfo en su documento, no son una filtración. Explicó que Rueda pidió que se grabase la conversación como forma de “evitar erradas interpretaciones sobre la posición del Gobierno” en caso de que miembros del grupo armado abordaran a las víctimas. Según la entidad, los audios evidencian “la finalidad del Gobierno de proteger a la población”.
Las revelaciones y las acusaciones cruzadas llegan en un momento difícil para la relación entre el principal grupo narcotraficante de Colombia y el Gobierno de Gustavo Petro. El presidente suspendió el cese al fuego con el Clan del Golfo el pasado 19 de marzo, después de denunciar que la organización estaba detrás de la violencia en el paro minero antioqueño. Rueda abordó esto en la reunión: “Se hizo un cese al fuego, pero resulta que ellos mataron a varias personas en el sur de Bolívar. A algunas de esas personas las torturaron”. Asimismo, el comunicado de su oficina reitera que “la suspensión del cese al fuego no justifica el irrespeto a los derechos humanos de la población ni el desconocimiento de los Derecho Internacional Humanitario”.
El 9 de abril es una fecha especial en la retórica del Clan del Golfo. El grupo, uno de los herederos de los paramilitares, se refiere a sí mismo como “Autodefensas Gaitanistas de Colombia” y afirma defender el legado de Gaitán, cuya figura ilustra el comunicado que difundieron el miércoles. La familia del líder, sin embargo, ha rechazado varias veces la denominación que les asocia a una estructura criminal y ha pedido al Gobierno que deje de utilizarla.
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