El Salón Pentatlón, donde hace unos días se celebró un concierto clandestino de neonazis y hombres de cabeza rapada, fue clausurado este jueves por autoridades del Instituto de Verificación Administrativa (Invea) de Ciudad de México. Las autoridades del Gobierno capitalino dieron a conocer que se hizo una visita de verificación administrativa, y los encargados del salón no presentaron los documentos requeridos para el aprovechamiento de suelo para realizar fiestas.
“Derivado de esa visita, se implementaron medidas cautelares consistentes en la suspensión de actividades, toda vez que no cuenta con el Certificado de Uso de Suelo como salón de fiestas”, menciona la dependencia. En una consulta realizada por EL PAÍS, el Invea precisó que la visita de revisión derivó de una denuncia ciudadana, aunque se trata de un proceso administrativo independiente.
EL PAÍS documentó una fiesta clandestina con ideología neofascista celebrada en este salón el pasado 29 de octubre, donde alrededor de 300 personas, en su mayoría hombres tatuados con esvásticas y otros elementos gráficos relacionados con ideología de ultraderecha, se reunieron en un concierto. De acuerdo con su página en redes sociales, este espacio estaba dedicado principalmente a las fiestas tradicionales, como bodas, XV años y de cumpleaños.
Los neofascistas que se reúnen en México no solo lo hacen en esta sala. Para la celebración del concierto El imperio contraataca, la fiesta más reciente, la ubicación se mantuvo en secreto hasta un día antes del evento. Todos los asistentes tuvieron que atravesar un riguroso filtro de seguridad para poder ingresar al recinto; su identidad era verificada con un código QR, una identificación oficial y una larga lista de confirmados, por lo que no se descarta que se realice una nueva congregación.
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