“Me gusta venir a Barcelona, es un sitio en el que me encanta jugar. Tengo muy bonitos recuerdos, no solo por ser campeón sino también de cuando jugaba de pequeño. Es un torneo diferente donde también viene mi familia y voy a pensar en todo menos en que tengo que defender el título”, aseguraba este sábado un sonriente Carlos Alcaraz en la sala de prensa del Reial Club de Tenis Barcelona (RCTB), donde se disputará, del lunes al domingo de la próxima semana, la 70º edición del Barcelona Open Banc Sabadell, conocido como Conde de Godó.
El del Palmar, número dos del mundo, llega a la capital catalana sin haber podido competir estos días en el Masters 1000 de Montecarlo debido a unas molestias en la espalda y a una artritis postraumática en la mano izquierda, derivadas de la intensa gira norteamericana sobre cemento. El murciano conquistó Indian Wells y posteriormente alcanzó las semifinales de Miami, en las que fue derrotado por Jannik Sinner en un intenso duelo de tres horas. Justo de físico, a continuación priorizó preservar el físico.
En todo caso, Alcaraz (19 años) ya se ha rodado sobre arcilla esta temporada. De hecho, antes de disputar los torneos estadounidenses emprendió el curso sobre la arcilla de Buenos Aires (campeón) y la de Río de Janeiro (semifinalista). Los buenos resultados le permitieron recuperar el trono del circuito en detrimento de Novak Djokovic, aunque el serbio (35 años) volvió a adelantarle tras la derrota del español en Florida.
Con ganas de seguir ejerciendo presión, el de El Palmar aterrizó este viernes en las pistas del RCTB y empezó a entrenar con Casper Ruud y Denis Shapolalov. “Me ha ido muy bien. Al final, necesito coger ritmo de competición y jugar puntos, y con estos jugadores me viene muy bien. Todavía quedan unos días para prepararme, pero de momento las sensaciones son buenas”, asegura Alcaraz, que se siente más maduro respecto al año pasado: “En ese sentido he mejorado, leo mejor lo que ocurre en pista y puedo cambiar las cosas si algo va mal, esa es la diferencia”.
El cuadro final, sorteado este sábado, proyectó una hipotética final entre él y Tsitsipas, un partido que ya se vivió el año pasado en cuartos; entonces saltaron chispas entre ambos y Alcaraz venció en tres sets. A su vez, el teórico trazado del torneo también depara la posibilidad de que pueda encontrarse en el desenlace del día 23 con el italiano Jannik Sinner, el tenista con el que está destinado a marcar una época en el circuito y con el que lleva un igualado 3-3.
“La rivalidad que tenemos es muy bonita, más aún cuando nos llevamos tan bien fuera de pista. Los dos somos muy jóvenes todavía, hemos jugado en grandes torneos, hemos hechos grandes partidos y hemos peleado por cosas bonitas. Cada vez que jugamos es muy divertido de ver. Espero tener una gran rivalidad con Sinner, al igual que la han tenido Nadal, Federer y Djokovic”, afirma el defensor del título, cuya superficie predilecta es el cemento, pero que no desdeña para nada la tierra batida, en la que ha ganado cinco de los ocho trofeos que ha logrado hasta ahora en la ATP.
Cuatro de los 10 mejores
“Es como estar en una batalla, y eso es lo que me gusta. Cada punto es una batalla y tienes que jugar más táctico”, incide Alcaraz, protagonista de una edición especial para el Godó. Será la 70ª y, finalmente, no podrá contar con Rafael Nadal, que todavía no está a punto después de tres meses en la enfermería. El viernes, el 12 veces ganador del torneo comunicó su baja, confiando en que la evolución le permita regresar a la competición dentro de dos semanas, en Madrid. “Aún no me encuentro preparado y sigo, por tanto, mi proceso de preparación para la vuelta a la competición”.
“Con todo lo que ha conseguido Rafa en Barcelona es una pena no tenerlo aquí y no disfrutar de su tenis. Le deseo una pronta recuperación para que podamos seguir disfrutando de él”, señala Alcaraz, que encabeza un cartel del que también se ha caído a última hora el ruso Daniil Medvedev, pero al que le sobran los alicientes; de hecho, cuatro de los 10 mejores jugadores del circuito forman parte del listado, que contará por última vez con Feliciano López. El toledano, de 41 años y debutante en 1998, con apenas 16 años, se despide del Godó con el récord de 22 participaciones.
La ausencia de Nadal y la renuncia de Medvedev –29 victorias y solo 3 derrotas esta temporada– allanan a priori el camino de Alcaraz, quien, no obstante, no se confía en absoluto y tratará de ofrecer su mejor versión en Barcelona, antesala de Madrid, Roma y Roland Garros. “Son grandes ausencias, pero no me siento favorito por ello. Cada partido es un mundo y todos los jugadores te pueden ganar perfectamente. Quiero evitar la presión y salir a disfrutar. Tengo que jugar concentrado cada día y a mi mejor nivel”, prolonga el murciano, mientras el club de Pedralbes se engalana y las entradas se agotan para verle.
Puedes seguir a EL PAÍS Deportes en Facebook y Twitter, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal.
