El arreón del euríbor, que se ha disparado 3,52 puntos en el último año, ha engordado la factura de los hipotecados a tipo variable que, básicamente, pasan a pagar más intereses por la deuda contraída con el banco porque el coste de la financiación es mayor. Las cuotas con revisión en diciembre se han encarecido un 49% de media y el importe mensual destinado al pago de intereses se ha multiplicado por ocho.
El euríbor determina el interés de unas cuatro millones hipotecas variables en España. El indicador cerró 2022 con una tasa del 3,018% frente al valor negativo del -0,502% de un año antes. Para un préstamo tipo reciente –firmado por ejemplo hace dos años– de 150.000 euros a 25 años con un diferencial del 1% supone un incremento de la letra mensual de 262 euros, al pasar de 531 euros a 793 euros. Una parte de esa cantidad se dedica a la amortización del capital y otra al abono de intereses. Si bien antes de la revisión apenas se estaban pagando unos 57 euros de intereses, con la nueva cuota ese montante asciende a 470 euros, un 720% más.
El índice de referencia cerró 2022 en el 3,018% frente al -0,502% de un año antes
Hay que tener en cuenta que el impacto del euríbor no es el mismo en todas las hipotecas, si no que afecta en mayor medida a las menos antiguas. Esto es así porque en España rige el sistema de amortización francés, según el cual al principio se abonan más intereses que capital y los intereses se reducen a medida que transcurre el tiempo. Así, si el crédito hipotecario se hubiera formalizado en 2010, los intereses mensuales pasarían de unos 30 euros a unos 290 euros. En el caso de haber realizado la operación en 2000, los intereses quedarían en 57 euros frente a los cinco euros previos.
El euríbor continúa condicionado por la alta inflación y por la perspectiva de nuevas subidas de tipos por parte del Banco Central Europeo (BCE). “Los próximos datos serán determinantes. El mercado espera que la inflación se modere, lo que podría conducir a un cambio de tendencia. Ya hemos conocido el dato preliminar del IPC de España en diciembre (5,8% frente al 6,8% anterior), que podría indicar que la tasas máximas en los precios ya han tocado techo. Aún así, se encuentra muy por encima del objetivo del 2% a medio plazo, lo que seguirá presionando al BCE a subir los tipos”, sostiene Darío García, analista de XTB.
El BCE ya ha advertido de que continuará con las alzas de tipos para tratar de contener la inflación. Se esperan más aumentos de 50 puntos básicos en las próximas reuniones de política monetaria. “A pesar de ser cierto que la inflación parece estar remitiendo desde sus máximos del ciclo, la variable se mantiene y varios miembros del BCE han manifestado en los últimos días su apoyo a nuevas subidas significativas de tipos”, indica Juan José Fernández-Figares, director de análisis de Link Securities.
“El único escenario en el que la escalada de cuotas en la hipoteca podría contenerse sería aquel en el que se redujera la presión de los precios. Algo, a corto plazo, solo viable con un giro en el conflicto en Ucrania que relajase las tensiones en el mercado de la energía”, sostienen en la Agencia Negociadora, donde comentan que, si bien los hipotecados son los grandes perjudicados por la escalada de los tipos y del euríbor, “los bancos verán sustanciales mejoras en las cuentas de resultados, después de varios ejercicios con márgenes pequeños por los bajos tipos de interés”. Eso sí, las entidades se enfrentan a un probable incremento de la morosidad por las dificultades de las familias para hacer frente a los fuertes incrementos en sus cuotas hipotecarias.
La mayoría de expertos prevén un euríbor entre el 3,5% y el 4% a lo largo de 2023
Las previsiones de los expertos apuntan a que el euríbor, ya en el 3,3%, seguirá subiendo en los próximos meses, pero de forma menos intensa que en 2022. La mayoría de analistas pronostica que el índice se situará entre el 3,5% y el 4% en 2023. Algunos creen que se estabilizará alrededor del 3% o incluso que frenará. “Una eficaz lucha contra la inflación generará, a largo plazo, una bajada del euríbor”, señala el responsable de análisis hipotecario de Hipoo, Rafael Moral, que espera que 2023 “no sea un año con fuertes subidas del euríbor”. Según los cálculos de la fintech, el índice alcanzará picos cercanos al 3,5% y, a partir del tercer trimestre, frenará e incluso caerá hasta el 2,5%. Desde la plataforma Trioteca estiman que “se estabilizará en torno al 3% y el 4% a lo largo del año”.
Aumento de las subrogaciones
Cambio. Desde la plataforma Trioteca creen que 2023 estará marcado por un aumento de las subrogaciones –cambiar la hipoteca de banco–. Calculan que el 29% de las hipotecas firmadas en 2022 fueron subrogaciones. Este tipo de operaciones, que buscan mejorar las condiciones del préstamo superarán, apuntan, el 50% en 2023.
Oferta. Los bancos sigue encareciendo los tipos fijos, que superan el 3% TAE, y abaratando los variables. El CEO de TRIOTECA, Ricard Garriga, anticipa una “competitividad de precios abrumadora en la oferta de hipotecas variables, a tipos de entre el 0,5% y el 0,8% más euríbor”.