Sito Pons ha recibido con júbilo, desde su casa en Londres, la noticia de su absolución. Llevaba ocho meses esperando una sentencia que al fin ha llegado y que amenazaba su vida en libertad. La Fiscalía pedía 24 años de cárcel para el exampeón mundial de motociclismo por seis delitos de fraude fiscal. La Audiencia de Barcelona le ha absuelto de forma contundente. Contra el criterio de la acusación, los jueces concluyen que entre 2010 y 2014 Sito Pons no podía ser considerado residente fiscal en España sino en Mónaco y Reino Unido, y subraya que pasaba la mayor parte del año “viajando por circuitos repartidos por todo el mundo”, según la resolución.
El actual director de Pons Racing -una escudería que compite en la categoría de Moto 2 del Mundial de motociclismo- fue uno de los objetivos de la Agencia Tributaria en su campaña para perseguir el fraude fiscal de personajes públicos y deportistas de élite. Tras las indagaciones sobre su patrimonio, la Fiscalía se querelló contra él en 2016 por el presunto fraude de casi medio millón de euros en IRPF. Más tarde, esa cantidad se aupó hasta los 2,7 millones de euros. Además de la pena de cárcel, la Fiscalía pedía el pago de una multa de 12 millones con el argumento de que pasaba más de la mitad del año en España y debía pagar el impuesto de IRPF. Un juzgado investigó el caso que, como suele ocurrir en los delitos de fraude fiscal, se alargó hasta la desesperación. El pasado febrero, tras seis años de tortuosa instrucción, se celebró el juicio.
Como piloto, Sito Pons se proclamó campeón mundial de 250cc en 1988 y 1999. En las fechas bajo sospecha (de 2010 a 2014) dirigía la escudería Pons Racing, que competía tanto en el Mundial de motos como en las World Series by Renault. La Fiscalía considera que gestionaba su empresa desde unas oficinas en Castellbisbal (Barcelona) y que, cuando acudía a los competiciones, salía habitualmente desde el aeropuerto de El Prat. Según la acusación, el alquiler de una vivienda en Mónaco -y la obtención del permiso de residencia por las autoridades del país- fue un montaje para evitar el pago de impuestos en España, ya que no constan, por ejemplo, recibos de agua o luz en esa vivienda.
La sentencia, sin embargo, da plena credibilidad a la declaración de Sito Pons, que explicó que durante ese periodo viajaba por todo el mundo y fijó su residencia primero en Mónaco y después en Londres, donde reside desde 2013. La defensa del expiloto, que ha ejercido la abogada Miriam Company -del despacho Molins- aportó una sentencia firme de 2011 en la que se decía probado que su cliente era residente en Mónaco para desbaratar la tesis de la Fiscalía. En cuanto a Londres, presentó notificaciones de la administración a su domicilio en esa ciudad.
La Audiencia de Barcelona concluye que “la mayor parte de los intereses económicos y activos financieros” de Sito Pons, así como “el núcleo de su actividad económica” se concentraban esos años fuera de España. El despacho Molins se ha felicitado por la resolución y ha celebrado que hayan quedado “completamente desacreditadas unas acusaciones que, sin fundamento alguno, le atribuían graves defraudaciones tributarias”. Antes de comenzar el juicio, Sito Pons había depositado casi tres millones de euros como fianza para cubrir su responsabilidad civil en caso de condena. Si la sentencia es firme -está por ver si la Fiscalía o la Agencia Tributaria recurren la resolución- esas cantidades le serán devueltas.
Puedes seguir a EL PAÍS Deportes en Facebook y Twitter, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal.