La primera foto de los presupuestos de la Generalitat será para los comunes. El Govern y En Comú Podem han cerrado este miércoles un acuerdo para aprobar las futuras cuentas de la Generalitat que contempla subir un 33% el impuesto a los pisos vacíos así como igualar el de patrimonio al mismo nivel del Estado. El president Pere Aragonès y la líder de En Comú Podem, Jéssica Albiach, presentarán el pacto hoy a las 17.30. ERC cuenta con 33 diputados y los comunes ocho por lo que el Govern necesita el apoyo de una de las otras dos grandes fuerzas (PSC, 33 y Junts, 31) o bien la abstención de ambas para aprobar las cuentas. La mayoría absoluta está fijada en 68 escaños.
Esta es la tercera vez que el Govern y los comunes cierran un acuerdo presupuestario. La formación de izquierdas avisó hace semanas que su prioridad es desplegar un plan de choque para la sanidad y aumentar la fiscalidad, incluyendo subir el IRPF a las clases más altas con ingresos superiores a los 120.000 euros. “En fiscalidad lo que no se puede es no hacer nada”, dijo el pasado 17 de noviembre el diputado Joan Carlos Gallego en la presentación de sus propuestas. Los comunes no han logrado esa medida pero sí, en cambio, han arrancado el compromiso de elevar un 33% el impuesto que grava los pisos vacíos. En 2020, la Generalitat recaudó 8,8 millones de euros por este tributo. Esa recaudación se utilizó en la compra de viviendas por tanteo y retracto. El tributo grava a las viviendas vacías durante dos años sin justificación. Por ese motivo, el gravamen se aplicó en 2020 a unos 8.000 pisos.
El acuerdo supone un incremento del impuesto de patrimonio en Cataluña con el objeto de igualarlo al nuevo tributo de grandes fortunas presentado en el Congreso por PSOE y Unidas Podemos. De esta forma, la Generalitat se asegurará el ingreso de 12 millones de euros adicionales a lo que ya recauda actualmente por ese tributo y que de otra forma irían a las arcas del Estado. El impuesto de las grandes fortunas está diseñado para los contribuyentes con un patrimonio superior a los tres millones de euros y solo se aplicará en aquellas comunidades que no recauden por Patrimonio o cuyo gravamen sea inferior al estatal. De esa forma se quiere conminar a los gobiernos autonómicos a aplicarlo y se crea una homogeneización del tributo en todo el Estado. El proyecto surgió a raíz de que el gobierno andaluz anunciara su rebaja, siguiendo la estela de la Comunidad de Madrid.
El interrogante es cómo afectará el acuerdo en la negociación que mantiene ERC con el PSC
El interrogante es cómo afectará el acuerdo en la negociación que mantiene ERC con el PSC. Los socialistas sostienen que Esquerra ha vuelto apostar por la misma fórmula de la investidura -pactar primero con el socio pequeño, en ese caso la CUP, para hacerlo después con el grande- que entraña sus riesgos. El PSC reivindica desde el minuto uno que tiene tantos diputados -33- como ERC y reclama una negociación de tú a tú. El riesgo, advirtió en su día el PSC, es que el acuerdo contenga elementos que no les gusten. “A ver entonces qué hacen”, dijeron fuentes socialistas.
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Los socialistas, partidarios de la prudencia fiscal, exigen en la negociación desencallar cinco proyectos, entre ellos la ampliación del aeropuerto de El Prat, el Hard Rock Café o la B-40, el cinturón del Vallès. “El calendario no nos presiona”, avisó este martes la diputada socialista Alícia Romero que culpó al Govern de negociar con extrema lentitud y de hacer ya inevitable la prórroga presupuestaria.
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