Un nuevo tropiezo del Arsenal, esta vez ante el Nottingham Forest (1-0) ha resuelto la Premier League. A pesar de que al Manchester City le quedan tres partidos por jugar (Chelsea este domingo, Brighton el miércoles y Brentford el próximo fin de semana), ya es campeón y logra de esta manera su noveno título como ganador de la Liga inglesa. Siete de ellos son la consecuencia de que en 2008 City Football Group, una sociedad inversora de Abu Dabi, pusiese 250 millones de euros para adquirir el club y llevarlo a la realeza del fútbol europeo. En 2012 alzó la Premier bajo la dirección de Roberto Mancini y fue ahí cuando incorporó primero a Ferran Soriano como primer ejecutivo. Casi de inmediato llegó Txiki Begiristain a la dirección deportiva. En la mirada de ambos siempre estuvo Pep Guardiola y el recuerdo de un equipo que llevó al Barcelona a la cúspide del fútbol mundial. Manuel Pellegrini dirigió al equipo que ganó la Premier en 2014, pero tras dos fiascos seguidos dejó paso en julio de 2016 al entrenador catalán. Desde entonces, el City tiraniza la Liga inglesa, con cinco entorchados en siete campañas. Por el camino lo contempla un gasto de 1.240 millones de euros, menos en todo caso de lo invertido en ese tiempo por Chelsea, Barcelona o Juventus y casi al nivel de lo expuesto por Manchester United, rival doméstico que, por contra, ha ingresado más de 300 millones menos por el traspaso de jugadores. Con todo, el Manchester City litiga con la Premier League, que ha presentado cargos contra la entidad por cometer 115 infracciones del reglamento financiero.
De aquel City que Guardiola heredó hace siete años apenas queda una pieza, Kevin de Bruyne. Aquel verano se agregaron Stones y Gündogan para empezar a armar un equipo que no ha dejado de evolucionar para transitar desde el ya conocido juego de posición hacia la capacidad de buscar superioridades que lo convierten en más vertical. El último desafío, el de integrar a Erling Haaland en el funcionamiento colectivo, se ha resuelto con 36 goles en 33 partidos del astro noruego, y nuevos recursos para romper defensas a través del pase en largo y la segunda jugada. Guardiola ya no es el adalid del falso nueve y por el camino ha matizado su habitual querencia por alinear regateadores en las bandas para abrir el campo con centrocampistas. El creciente peso de Grealish en detrimento de Mahrez ejemplifica esta tendencia.
El City gana y crea tendencia. Le ha enseñado al mundo que los laterales pueden asumir posiciones interiores cuando se trata de construir juego porque Guardiola entiende que así gana líneas de pase y abre espacios al arrastrar a los extremos del rival. En la base del club ya se cocina ese tipo de jugador. Rico Lewis, de apenas 18 años y con una década de bagaje en la academia del City, ya se ha mostrado esta temporada en ese rol. En los últimos partidos esa superioridad con balón en la medular la ha buscado con un central, Stones.
“Es probablemente el mejor equipo de la historia de la Premier”, resolvió antes de esta jornada Mikel Arteta, técnico del Arsenal que se sentó en el banquillo de los gunners después de pasar algo más de tres temporadas al lado de Guardiola en el City. Desde entonces se han cruzado en 10 ocasiones y Arteta solo ganó en un enfrentamiento de Copa. Esta temporada ha pilotado el máximo desafío para el campeón, que solo ha sido líder en ocho jornadas. El Arsenal lo fue el resto del campeonato e incluso en su ecuador atesoraba una renta de siete puntos. Le faltó reprís en un final con apenas dos triunfos en las ocho últimas jornadas.
La quinta Premier en seis años sitúa al Manchester City en la ruta de los grandes dominadores del fútbol inglés, del Liverpool que entre 1975 y 1984 se llevó siete de los nueve campeonatos que se jugaron o del Manchester United que hizo lo propio entre 1992 y 2000. El dominio se explica también a través de la puntuación, porque en los seis últimos ejercicios el City promedia (aún sin acabar el actual) 90,5 puntos por temporada, ocho por encima del Liverpool. Manchester United, Arsenal, Tottenham y Chelsea se sitúan en una franja entre los 68 y los 66 puntos de promedio, a más de 20 del gran dominador del campeonato. No se atisba que se pueden acercar más que a través de una profunda y atinada renovación que, por ejemplo, en el caso de los gunners ya empiezan a lograr.
El reto ahora para el City es el triplete para convertirse en el décimo club europeo en llevarse Liga, Copa y Copa de Europa o Champions en una misma campaña. Antes apenas lo lograron Celtic (1967), Ajax (1972), PSV Eindhoven (1988), Manchester United (1999), Barcelona (2009 y 2015), Inter (2010) y Bayern (2013 y 2020). Si el campeón de la Premier supera al Manchester United en la final de Copa y al Inter en la de la Champions, Pep Guardiola será el primer entrenador de la historia en sumar dos de esos tripletes.
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