En un fin de semana cualquiera, la victoria de Brad Binder y la tercera posición de Jack Miller en la carrera al sprint del GP de España de MotoGP se hubieran calificado como un magnífico resultado de las KTM. Y a otra cosa. Sin embargo, la presencia unos puestos por detrás de Dani Pedrosa, probador de la marca austríaca, subraya la importancia de la leyenda del motociclismo español como desarrollador de la máquina de Mattighofen. “Ha sido divertido. Ver a las KTM ahí delante y luego pasar por meta y tener a tres en las seis primeras posiciones me satisface mucho”, celebraba el piloto de Castellar del Vallés.
Hacía dos años que el samurái no competía en MotoGP, y después de maravillar el viernes al terminar tercero y liderar los primeros entrenamientos en Jerez, el sábado confirmó que a sus 37 años mantiene intactas la velocidad y el talento. Sexto en la clasificación y en la carrera al sprint –a tan solo 1,7 segundos del ganador, la vuelta rápida en carrera para él– después de una jornada alocada, Pedrosa fue vitoreado por la afición en el circuito Ángel Nieto. También fue agasajado y aplaudido por su equipo, consciente de que su papel entre bambalinas ha catapultado el potencial de sus monturas. “Muchas gracias al equipo, a los probadores y a Dani en especial, que nos ha conseguido el paquete técnico perfecto aquí”, comentó Binder, el ganador, a los micrófonos de DAZN.
“Tenemos uno de los mejores pilotos probadores de la historia. Ha sido un magnífico trabajo de todo el equipo”, celebraba Miller a pie de pista para la señal internacional. Pedrosa ha ganado cuatro veces y acumula 11 podios en este escenario, y hace dos semanas estuvo preparando la prueba en un test privado que permitió afinar las KTM para estos días. Aunque nunca había vivido un fin de semana bajo el nuevo formato al sprint, que reduce el tiempo de entrenamientos y añade estrés a las ya de por sí exigentes jornadas de los pilotos, el de Castellar demostró que no ha perdido ni un ápice de instinto sobre la moto. “Segunda fila es un buen resultado, pero quizás podría haberlo hecho mejor”, reconocía. Este domingo (15.00h, DAZN), partirá sexto con la ambición por las nubes, con la Aprilia de Aleix Espargaró, que se cayó en el sprint, en la pole position.
Pedrosa empezó a colaborar con la fábrica austríaca en junio de 2019. Un año después de su llegada, en la cuarta prueba del Mundial de 2020, Binder firmó la primera victoria en MotoGP para KTM. El proyecto, que arrancó en 2017, no había logrado todavía buenos resultados más allá de un podio de Pol Espargaró en la última prueba de 2018, pero la llegada del tricampeón del mundo revolucionó al equipo de pruebas. “Estamos encantados de poder contar con un piloto como él, que trae tanta experiencia a nuestro proyecto”, decía el director deportivo de la marca, Pit Beirer. “Para un piloto es importante sentir que realmente le necesitan, que no va a ser solo una figura de marketing. Él mantiene la pasión intacta, y quería un trabajo que le exigiera al máximo”, añadía.
Pedrosa tuvo sobre la mesa varias opciones tras su retirada en 2018. Estuvo cerca de alejarse de forma definitiva de los circuitos, pero luego volvió a sentir las mariposas cuando vio que el interés que despertaba en el ‘paddock’ seguía siendo elevado. Tuvo sobre la mesa formar parte del equipo satélite de Yamaha, pero finalmente optó por mantenerse más a la sombra y fichar como probador de KTM. “Desde el principio vi que había mucho espacio para mejorar y recortar las distancias. Hemos trabajado muy duro desde mi llegada, y me siento satisfecho con los resultados de las últimas temporadas”, valoraba el catalán durante el GP de Estiria de 2021, el día en que disputó su primera carrera oficial con una moto que no fuera Honda. “Es interesante constatar su compromiso y ver que todavía quieren más”, agregaba tras firmar una décima posición que ya fue toda una sorpresa.
Desde su entrada al proyecto, KTM ha logrado cinco victorias y 15 podios, y en el box hasta le han puesto un nuevo mote. “Dani es el senador”, apunta Francesco Guidotti, director del equipo. Pedrosa aporta veteranía y además ejerce de ilustre consejero para los pilotos a tiempo completo. “Tenerle dentro del garaje es un sueño. Cuando tengo un problema, acudo a él, hablamos y le escucho. Su opinión es muy importante, y cuando me da un consejo es magnífico, porque luego siempre mejoro”, apuntaba Raúl Fernández, debutante el curso pasado como miembro del equipo satélite de KTM, ahora con Aprilia. El papel como mentor de Pedrosa se traduce incluso al equipo de pruebas de la marca, que pretende empapar a Jonas Folger, de 29 años, de toda su sabiduría antes de que cuelgue el casco y los guantes de forma definitiva.
La FIM anuncia un Mundial femenino
La Federación Internacional de Motociclismo (FIM) y Dorna anunciaron el sábado la creación de un nuevo Campeonato del Mundo femenino de velocidad. Será un certamen que arrancará en 2024 con seis pruebas en Europa y monturas de fabricante único. Se correrá en paralelo al Mundial de Superbike (WSBK). “Hemos dado muchas vueltas a este asunto, y como ya hacemos en motocross, enduro y trial, vamos a empezar un campeonato para mujeres en competición de circuitos”, detallaba Jorge Viegas, presidente de la FIM. “Es un campeonato en el que queremos que las mujeres sean profesionales, como en MotoGP. No es promocional, no es un paso a otra cosa. Es definitivo. Queremos que las mujeres que corran aquí, vivan de eso, sean profesionales”, añadía.
El motociclismo, bajo sus cauces tradicionales, ya tiene a una campeona del mundo en Ana Carrasco, que hizo historia al ganar el Mundial de Supersport 300 en 2018 y ahora forma parte de la parrilla de Moto3. La idea de todos los actores es aumentar la participación de las mujeres en la competición. “Es un proyecto vivo. Queremos aumentar el porcentaje de pilotos que tenemos y a partir de ahí ya veremos dónde terminamos”, aseguraba Gregorio Lavilla, responsable del WSBK.