Entre bomba y bomba informativa fruto de las declaraciones vertidas en su controvertido documental de seis capítulos en Netflix, Enrique de Inglaterra y Megan Markle estrenaron el pasado 31 de diciembre la serie documental Líderes de nuestro tiempo, de la que son productores ejecutivos, y que forma parte de su jugoso contrato de creación de contenido para Netflix que se estima en 100 millones de dólares (unos 94 millones de euros al cambio actual). En Líderes de nuestro tiempo, los duques de Sussex aparecen en la sombra —razón por la cual ni su estreno ni su contenido ha trascendido como su anterior documental— dando voz a personajes “comprometidos a cambiar el mundo” y que “comparten sus inspiradoras historias”, según recoge la sinopsis. Entre estos personajes encontramos a la joven activista contra el cambio climático Greta Thunberg, a la difunta jueza del Tribunal Supremo Ruth Bader Ginsburg o a la primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern. El príncipe Enrique sí aparece en el tráiler de promoción, donde pronuncia unas palabras que han generado polémica: “Esto está inspirado por Nelson Mandela”.
Estas palabras no han gustado a Ndileka Mandela, nieta del activista y político sudafricano fallecido en diciembre de 2013, quien, en unas declaraciones en The Australian, ha acusado a los mediáticos duques de “robar” las palabras de su abuelo para “hacerse millonarios”. “Enrique tiene que ser auténtico y buscar su propia historia, ¿qué relevancia tiene la vida de mi abuelo con la suya?”, declaró Ndileka Mandela. “No creo que ni él ni Meghan hayan conocido a mi abuelo”, continuaba, “tal vez cuando Enrique era joven en el palacio de Buckingham, pero están usando sus citas en el documental para atraer a la gente y ganar millones sin que la familia Mandela se beneficie”.
Mandela Ndileka se ha mostrado contrariada al comprobar que la pareja parecía comparar sus propias batallas dentro de la familia real británica con el largo camino hacia la libertad de su abuelo, y ha calificado esa comparación de “molesta y tediosa”. “No puede compararse. Sé que la Fundación Nelson Mandela ha apoyado la iniciativa del documental, pero la gente ha robado las citas de mi abuelo durante años y ha usado su legado porque saben que su nombre vende: Enrique y Meghan no son diferentes a ellos”. También ha añadido que, aunque admira al príncipe Enrique por “tener el coraje de romper con una institución como la corona británica”, considera que “todo viene con un precio” y ahora debe “financiar su propia vida”.
En el tráiler de Líderes de nuestro tiempo, que efectivamente ha sido coproducido por la Fundación Nelson Mandela, Enrique recupera una de las citas más recordadas de Mandela: “Lo que cuenta en la vida no es el mero hecho de haber vivido”. Después, es Meghan Markle quien termina la frase: “Es la diferencia que hemos hecho en la vida de los demás lo que determinará el significado de la vida que llevamos”. Con música inspiradora que va in crescendo, aparecen los protagonistas de cada episodio, junto a imágenes icónicas de Nelson Mandela, como la de su salida de prisión en 1990. “Esto va sobre personas que han tomado decisiones valientes”, continúa Enrique. “Que han luchado por el cambio y se han convertido en líderes”, añade Meghan. Y Enrique finaliza: “Y nos inspiraron a todos, para vivir y para liderar”.
No es la primera vez que los duques de Sussex se enfrentan a críticas por hacer una comparación un tanto arriesgada entre ellos y la figura de Nelson Mandela. A finales de agosto de 2022, Meghan Markle concedió una entrevista en profundidad a la revista estadounidense The Cut, donde aseguró que durante el estreno en Londres del remake del clásico de Disney El rey león, en 2019, un miembro del reparto se le acercó para comparar su boda, celebrada en mayo de 2018, con la liberación en 1990 del político sudafricano que marcó el fin del apartheid. “Tengo que contártelo: nos alegramos en las calles lo mismo que cuando Mandela fue liberado de la cárcel”, le habría asegurado, según narró la propia Markle. La anécdota, enterrada en un extenso y amable perfil de la duquesa, llamó la atención de los medios británicos, que se apresuraron a contrastar la información con los actores de la película. En la cinta solo aparecía un actor sudafricano, John Kani, que prestó la voz al personaje de Rafiki, y dijo no conocerla personalmente: “Nunca he conocido a Meghan Markle. Esto parece una especie de paso en falso por su parte. Soy el único miembro sudafricano del reparto y no asistí al estreno en Londres”.
John Kani, que fue activista durante los años más duros del apartheid y también amigo personal de Mandela, señaló que la comparación, más allá de que alguien realmente la formulara, resultaba descabellada y “desconcertante”. La liberación del político sudafricano, tras 27 años de cautiverio, fue un “momento histórico” mientras que el matrimonio de Markle con el príncipe Enrique no fue “nada del otro mundo” en Sudáfrica. Los dos acontecimientos “no pueden compararse”, continuó: “La gente no se acuerda de dónde estaba o qué hacía cuando Meghan se casó con Enrique”.
Desde que el pasado 8 de diciembre Netflix estrenase la esperada serie documental sobre el príncipe Enrique de Inglaterra y su esposa, Meghan Markle, donde los protagonistas contaban en primera persona su historia de amor —desde sus primeras citas y el compromiso del príncipe y la exactriz hasta su decisión de abandonar el Reino Unido y ser independientes de la familia real—, los duques de Sussex no han dejado de copar titulares en los medios británicos e internacionales. No es para menos: al que se calificó como “incendiario” documental de los royals le seguirá en pocos días la “incendiaria” biografía del príncipe, escrita por el autor y periodista J.R. Moehringer, que se publica el próximo martes 10 de enero.
Al igual que hizo Netflix con el documental, la editorial Penguin Random House en Inglaterra (en España será editada por Plaza&Janés) también tira de secretismo para evitar filtraciones, siguiendo un protocolo de seguridad que ya ha sido comparado con el del lanzamiento de la saga literaria de Harry Potter. A pesar de ello, algunos medios y tabloides británicos se han hecho eco de comentarios de fuentes anónimas que han tenido acceso al libro, y lo han calificado como “más dañino para la familia real de lo que esperan”.
Líderes de nuestro tiempo aparece entre el documental y el libro como un título menor, una oportunidad para que los duques de Sussex dejen de hablar de sí mismos para mostrar las causas que les mueven. Sin embargo, una aparición de pocos segundos en el tráiler ha bastado para volver a generar una nueva polémica. Queda demostrado que, cuando se trata de Enrique y Meghan, todo lo que tocan se convierte en noticia.