El piloto español de MotoGP Marc Márquez (Repsol Honda) explicó este jueves los motivos por los que no va a correr este fin de semana el Gran Premio de España y advirtió que los médicos le dejaron claro que era “una locura” y que “había riesgo” para su carrera deportiva de haber vuelto sin tener totalmente curada la lesión del dedo de la mano derecho, “uno de los más importantes” de cara a pilotar.
El ocho veces campeón del mundo no estará en el Circuito de Jerez-Ángel Nieto y se perderá su tercera carrera consecutiva del Mundial de Motociclismo por la lesión que se produjo en la mano derecha tras su caída en el estreno en Portimao (Portugal).
El catalán se sometió a un TAC el pasado martes para ver la evolución de su dedo operado y tras la prueba, tres equipos médicos diferentes le recomendaron no correr. “Había riesgo para mi carrera, no sólo por tres o cuatro meses”, advirtió Márquez en rueda de prensa anunciada este mismo jueves en Jerez. “La decisión de no correr fue relativamente fácil. Tenía la esperanza y pensaba que me recuperaría en cuatro semanas, pero tras el TAC del martes, de forma unánime, los tres equipos médicos me dijeron que era una locura”, subrayó.
Para el español, “no era sólo el riesgo de caerse” lo que desaconsejaba su participación. “Este es uno de los dedos más importantes para un piloto, sobre todo a la hora de frenar, y sólo con la presión en el manillar había mucho riesgo de que saltara la cirugía”, apuntó.
“Es uno de los puntos en los que más nos apoyamos y si pasaba algo, había manera de recuperarlo, pero quedarían secuelas. Fue fácil la decisión porque ya me pasó lo del brazo y si te quedan también en el punto que apoyas el manillar…”, confesó el piloto del Repsol Honda.
“Tiro con la fuerza de voluntad”
Márquez indicó que su “objetivo” era correr en Jerez, pero que los doctores marcaron su regreso entre Le Mans (Francia) y Mugello (Italia). “Decidirá el TAC de la semana de antes. Perderse carreras duele, perderse el GP de España más y sobre todo el único test que hay hasta Misano”, lamentó, aclarando que “no es cien por cien seguro” que esté en el Gran Premio de Francia del 14 de mayo.
Y es que tras la carrera del domingo, los pilotos de la categoría ‘reina’ tendrán un día de pruebas, aunque el de Cervera recuerda que para Honda estará “dos pilotos muy buenos” como su compañero Joan Mir y Alex Rins, del LCR.
“Desde el año 2020 llevo encadenando lesión tras lesión, por diferentes circunstancias, y para mí es mejor mantener la fuerza de voluntad que la motivación. Cuando te lesionas, la motivación baja y es la fuerza de voluntad la que tira. Mi pasión por este deporte me lo pide”, recalcó sobre sus últimos años con problemas físicos.
Márquez también se refirió a la polémica con su penalización tras su incidente en el Gran Premio de Portugal. “Recibí una penalización por un error y con la que estoy completamente de acuerdo, pero no entendí el cambio a los dos días. El equipo decidió apelar porque cuando estás lesionado no piensas en estas cosas”, detalló.
“Se tiene que ser claro, recibió la penalización por escrito y la tenía que cumplir en Argentina y luego la cambiaron. La peor penalización es la de estar lesionado y también la mejor manera de aprender, nadie quiere crear una situación de peligro ni lesionarse a sí mismo”, sentenció.
Finalmente, el ocho veces campeón del mundo fue claro sobre los toques en pista tras las críticas recibidas por su incidente en Portugal. “Los toques han pasado, pasan y pasarán. Ojalá pasen lo menos posible, pero todos los grandes de la historia los han tenido, y tengas más o menos experiencia, vas al límite. Nadie quiere caerse y menos con otro piloto, pero de todo aprendes. Esto es el motociclismo y quien no quiera verlo así no ha visto muchas carreras”, zanjó.
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