El exprocurador general de la República Jesús Murillo Karam ha abandonado este miércoles el Hospital Belisario Domínguez, donde se encontraba desde el pasado 3 de noviembre recuperándose de una cirugía urgente. Murillo Karam ha sido trasladado a la Torre Médica del Centro de Reinserción Social Tepepan, donde continuará con su tratamiento médico.
El exprocurador salió del Reclusorio Norte el pasado 19 de octubre para atender una cita médica sobre el control de su colesterol y triglicéridos altos en el Hospital de Xoco. Murillo Karam se encontraba en el penal cumpliendo una prisión preventiva tras ser vinculado a proceso en agosto por su presunta participación en los delitos de desaparición forzada, tortura y obstrucción a la justicia, en el marco de las investigaciones por el caso Ayotzinapa. El responsable de la “verdad histórica” se encontraba entre rejas antes de la cirugía, a la espera de la decisión judicial sobre el caso.
El exfuncionario fue operado a sus 74 años de una endarterectomía carotidea de alto riesgo, es decir una intervención para eliminar placas que bloquean las arterias, con el fin de normalizar su flujo sanguíneo. La defensa del exfuncionario había pedido anteriormente al juez que reconsiderara su detención alegando que Murillo Karam padece enfermedad obstructiva pulmonar (EPOC) y varios males cardiovasculares. Además, pidieron la prisión preventiva domiciliaria.
La detención de Murillo Karam se realizó en la misma semana en la que el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador presentó las conclusiones de su investigación sobre el caso Ayotzinapa. Murillo es el exfuncionario de más alto rango llamado ante la Justicia para responder por la investigación. Todavía, como prófugo figura también el exdirector de la Agencia de Investigación Criminal, Tomás Zerón, que se encuentra en Israel desde el 2020.
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