Playoffs NBA – playoffs – jornada 15
Hay que remontarse a la Navidad de 2019, a una victoria contra los Houston Rockets, para recordar un partido donde Draymond Green anotó más de 20 puntos. El polémico defensivo de los Warriors de Golden State ha sido este miércoles uno de los jugadores clave en la victoria sobre los Sacramento Kings (123-116). Los actuales campeones de la NBA están a una victoria de avanzar a las semifinales del Oeste para seguir su defensa del título. El sexto partido se jugará el viernes en San Francisco, donde los de Steph Curry han ganado 14 de los últimos 15 encuentros.
Green aportó 21 puntos desde la banca. Ha tenido la oportunidad de limpiar su reputación después de ser suspendido en el tercer partido de la serie por dar un pisotón en el pecho a Domantas Sabonis cuando estaba en el piso. Este miércoles, fue uno de cuatro Warriors que anotó veinte tantos o más (el equipo encestó el 52% de los tiros dentro del área). A la cabeza estuvo Curry, quien metió 31 y tuvo ocho asistencias. Klay Thompson (25) y Andrew Wiggins (20) fueron los otros dos. El pívot Kevon Looney igualó su récord personal con 22 rebotes. Golden State dominó en el juego defensivo con siete bloqueos por dos de sus rivales.
Los Kings terminaron terceros en el Oeste, pero los playoffs permiten que cada equipo reescriba su historia, como lo ha mostrado Miami eliminando a los Bucks en el Este. Los de Sacramento buscan todavía acomodo en la postemporada, una etapa que les fue inalcanzable durante 16 años y en donde los Warriors se mueven como pez en el agua.
Los Kings estuvieron esta noche en casa detrás en el marcador durante la mayor parte del partido. Al inicio del cuarto periodo iban rezagados por 12. Tuvieron una racha de 13-2 en tres minutos gracias a Malik Monk (21 puntos) que los colocó a un punto con cuatro minutos por jugar. Cuando tuvieron oportunidad de dar la vuelta al partido, los Kings cometieron un par de errores. Sus estrellas De’Aaron Fox (24 puntos a pesar de tener un dedo roto en la mano de tiro) entregó seis pelotas y Domantas Sabonis, quien encestó 21 y tuvo 10 rebotes, perdió cinco. El camino se les empieza a hacer cuesta arriba. Deben vencer el viernes a domicilio a los pupilos de Steve Kerr.
Los Grizzlies siguen con vida
Ja Morant y Desmond Bane han impulsado este miércoles a los Grizzlies con 64 puntos para derrotar a los Lakers. El triunfo obliga a que la serie vuelva el viernes a Los Ángeles para el sexto partido. Morant parece haber dejado atrás la lesión en la mano derecha, pues ha anotado 31 puntos (encestó 13 de 26 dentro del área) y atrapó diez rebotes. No fue el único doble-doble del encuentro. Bane, quien promedia 24.3 puntos por partido los últimos diez juegos, encestó 33 y también tuvo 10 rebotes. Las estrellas de Memphis han dejado claro por qué el equipo sostuvo el mejor récord como local del Oeste con 35 victorias y seis derrotas. Si los Lakers quieren alcanzar la semifinal en la conferencia tendrán que liquidarlos en el estadio Crypto para evitar jugar en Tennessee el séptimo.
Los Lakers han mostrado, una vez más, su dependencia de LeBron James. El astro de 38 años hizo el lunes un partidazo con 22 puntos en el que forzó la prórroga. Tras la victoria, sus compañeros lo recibieron en los vestidores balando, un guiño para la cabra, el Greatest Of All Time, o GOAT. Esta noche, James tuvo un arranque modesto con solo una canasta en sus primeros siete tiros dentro del área. No obstante, cerró la noche con 15 puntos y 10 rebotes. El lunes, en contraste, se convirtió en el jugador más grande de la NBA en superar los 20 puntos y 20 rebotes en playoffs.
Anthony Davis volvió al nivel que había mostrado durante la serie contra el número 2 del Oeste. El alero logró un doble doble con 31 puntos y 19 rebotes en 35 minutos en la cancha. El jugador, que está resentido de la cadera, está por debajo de los 26 puntos que promedió por partido durante la campaña regular. Austin Reaves sumó en su cuenta 17 puntos y seis asistencias.
Los Lakers tuvieron una racha de cierre de 20-7 en el último cuarto, lo que redujo la distancia con los locales, que llegaron a ir ganando de 17 puntos en la primera parte. Memphis desplegó, a forma de despedida, su poderío ofensivo con ocho canastas seguidas. Esto encendió a los 18.000 aficionados presentes. El esfuerzo ha dado vida a los Grizzlies para un partido más.
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