Una manifestación policial contra el Gobierno incluye por primera vez críticas a Feijóo y el PP | España

Críticas al presidente Pedro Sánchez y al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, pero también al PP con alusión directa a su líder, Alberto Núñez Feijóo. La manifestación convocada por Justicia Salarial Policial (Jusapol, la plataforma de agentes nacida en 2017) y las dos organizaciones surgidas de ella, el sindicato Justicia Policial (Jupol) y la asociación profesional Justicia Guardia Civil (Jucil), mayoritarias en ambos cuerpos, ha recorrido este sábado el centro de Madrid sin el apoyo presencial, por primera vez, de los dos principales partidos de la derecha, PP y Vox. Solo Ciudadanos, con el diputado Miguel Gutiérrez, ha acudido de manera testimonial a la movilización, convocada para reclamar mejoras en el sueldo y la jubilación de los agentes y en la que se han deslizado reproches al PP.

El distanciamiento entre el PP y las tres organizaciones sindicales, caracterizadas estas por mantener un fuerte enfrentamiento con el Gobierno de Sánchez desde que surgieron, se ha plasmado también en varias pancartas en las que se reclamaba a Feijóo una política diferente a la que en su momento aplicó el Ejecutivo de Mariano Rajoy, con Juan Ignacio Zoido como ministro del Interior, ante las reclamaciones salariales de los agentes, y que concluyó en 2018 con un acuerdo con otras organizaciones sindicales que Jusapol rechaza desde entonces por insuficiente. “Equiparación real ya. Feijóo no hagas un Zoido”, rezaban varios carteles con una fotografía de ambos dirigentes del PP.

Fuentes del PP ya adelantaron hace unos días a EL PAÍS que no acudirían este sábado a la protesta policial, en contra de lo que habían hecho en anteriores ocasiones. Esgrimieron que no querían que se malinterpretase su presencia al coincidir la manifestación con la precampaña electoral del 28 de mayo. En la anterior manifestación, celebrada el 4 de marzo en contra de la reforma de la ley de seguridad ciudadana, la conocida como ley mordaza, el PP estuvo representado por el vicesecretario general de los populares, Esteban González Pons, y por Vox acudió Javier Ortega Smith. En la primera, de noviembre de 2021, también contra los cambios en la ley mordaza, habían participado Pablo Casado, entonces presidente de los populares, y el líder del partido de extrema derecha, Santiago Abascal.

La manifestación ha iniciado su marcha en la Puerta de Alcalá de Madrid al mediodía para terminar, dos horas después, frente al Congreso de los Diputados. Las organizaciones convocantes han cifrado en 80.000 los asistentes y la Delegación del Gobierno las ha rebajado a 7.500. Las cifras son superiores, en todo caso, a las de la protesta de marzo, cuando Jusapol habló de 30.000 manifestantes y la cifras oficiales de 4.000. Sin embargo, quedan muy lejos de los datos de la concentración de noviembre de 2021, cuando los sindicatos calcularon 150.000 participantes y la Delegación del Gobierno admitió 20.000 asistentes.

La pancarta que encabezaba la marcha, con el lema “jubilación digna ya”, era sujetada por los principales dirigentes de Jusapol, Jupol y Jucil, así como de la CSIF, organización cuya sección de funcionarios de prisiones se ha unido a la protesta. Justo detrás, un manifestante sujetaba un cartel con la frase “Sánchez, que te vote Txapote”, que la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, pronunció en febrero en la Asamblea de Madrid —tomándola de un vídeo difundido en las redes sociales— y que indignó por igual al PSOE y a las víctimas del terrorismo.

El secretario nacional de Jucil, Ernesto Vilariño, había verbalizado poco antes del inicio de la manifestación esos recelos hacia el líder del PP, que él extendió a Vox, al preguntar a ambas formaciones que, ahora que se inicia un largo periodo de elecciones, se van a comprometer formalmente “con sus Fuerzas de Seguridad a igualar las jubilaciones [de policías y guardias civiles] con el resto de [los] policías”, en referencia a los cuerpos autonómicos. Recientemente, dirigentes de Jusapol se han reunido con miembros de estos dos partidos y Ciudadanos para reclamarles un apoyo a sus reivindicaciones.

Aunque la protesta ha puesto el foco principal en igualar las condiciones de la jubilación de policías y guardias civiles con las de los cuerpos autonómicos ―las organizaciones critican que pasan más tarde a retiro y, además, con pensiones más bajas―, la petición de equiparación salarial que desembocó en la creación de Jusapol y, posteriormente, Jupol y Jucil ha estado también muy presente. Las organizaciones policiales insisten en que el acuerdo de 2018 ha dejado los sueldos de los agentes aún lejos de los de los mossos, los agentes de la policía autonómica catalana. Sin embargo, fuentes del Gobierno insisten en que la aplicación del aquel acuerdo (que se hizo en tres tramos) se ha traducido en “el mayor incremento salarial” de la historia para los agentes, con una subida total de 33,3%. “Un policía recién incorporado gana 743 euros brutos más al mes que uno que lo hizo antes del acuerdo”, detallan como ejemplo.